¡Lo más importante es empezar con el pie derecho! Para ello es necesario tener una idea clara de las condiciones y el contexto actual de partida.
Si no tienes una idea clara de la situación en la que estás, no puedes ni planear ni decidir nada realmente impactante para un cambio real. ¡No basta con tener la certeza absoluta de lo que no quieres!
¡Quien bien empieza está a la mitad de la obra! Así que da la debida importancia a esta delicada fase y la define en detalles.
Para evaluarla eficazmente te sugiero que hagas un balance de los pocos aspectos realmente importantes que determinan el 90% de tu vida.
¡Sí! has entendido bien, el 90% del resultado de tus proyectos, pensamientos, sueños, objetivos, depende de poco más que un puñado de factores.
Para ser más precisos, de algunas capacidades y conocimientos definidos que son de todos y al alcance de todos, pero son claros y accesibles para muy pocas personas.
Evaluar todo esto es fácil con sólo dedicar un poco de tiempo y su total atención a la mini guía con las pruebas de evaluación que encontrará aquí.